Pese a que la cifra de pasajeros de entrada al aeropuerto de Ibiza hasta agosto indica un crecimiento del 6,7 %, y apunta un verano récord, el sector del ocio nocturno ha sufrido un descenso porcentual con respecto al verano de 2017. La ilusionante temporada récord que se auguraba en el mes de mayo se ha desvanecido en julio y agosto por varios motivos que tienen que ver con un cambio de tendencia puntual en los ámbitos local e internacional.
Los djs se han ido a la playa a pinchar para sus fans y seguidores, creando una nueva corriente de ocio nocturno y una nueva línea de negocio que resta a las discotecas un alto porcentaje de público.
La competencia en los destinos de origen de la música electrónica es cada vez más atractiva para los clubbers. Holanda, Alemania y el Reino Unido celebran grandes festivales al aire libre casi cada día durante el verano con line ups de los mejores djs de sus países, que están a la cabeza del TopTen mundial de la música de baile, en espectaculares escenarios y montajes. Otros destinos emergentes para el clubbing como Croacia, Mykonos y Bulgaria también han entrado en la oferta con interesantes festivales en preciosos lugares de la costa o en localizaciones espectaculares. Allí hay mayor permisividad para promover conciertos al aire libre y en plena naturaleza, a precios más asequibles y más cercanos para desplazarse en coche, tren o avión.
El 30% del turismo prestado que visitó Balears en la última década está encontrando enormes facilidades para viajar a otros destinos del Mediterráneo que han copiado el modelo de Ibiza aunque no hayan llegado a su desarrollo como ‘Meca de la Música’ y que no disponen de la oferta complementaria de la isla. Este goteo ha comenzado y puede ir a más.
La proliferación de grandes festivales por toda Europa, incluso en el vecino Portugal, con gran despliegue de medios y carteles de primer orden es otro atractivo para seducir a los clubbers y a los djs. Estas propuestas musicales reúnen, además, importantes line ups de artistas que antes estaban en el exclusivo circuito de Ibiza.
Faltan también nuevas figuras relevantes que sustituyan a Avicci, David Guetta, Calvin Harris y otros grandes del EDM, o nuevos estilos como el progressive techno y el resurgir del underground. Solo Martin Garrix, y en menor medida Black Coffee y Kygo, han traído aire fresco este verano a la ‘isla de la música’. Las Vegas y Miami también quieren jugar en la Champions de la electrónica pagando cantidades astronómicas a los Top djs. El Rey Midas del EDM, David Guetta ha cambiado su residencia ibicenca por La Vegas en septiembre, siguiendo a Tiesto.
Los precios de los alojamientos, tickets y la oferta complementaria se han disparado en los últimos años y han retraído a cientos de ‘clubbers’ europeos a divertirse en la noche de Ibiza
Precios desorbitados
Los precios de los alojamientos, tickets y oferta complementaria se han disparado en los últimos años a niveles imposibles para los jovenes de clase media europeos, estudiantes y clubbers en general. El brexit británico ha encarecido las vacaciones nocturnas en la isla y los amantes del dance tienen que reducir el número de pernoctaciones y centrar sus noches de baile en los fines de semana. Hasta el alquiler de casas privadas y alojamientos alternativos ha bajado considerablemente, otro factor a tener en cuenta. El efecto ‘masificación’ de julio y agosto juega del mismo modo un papel importante en este cambio de tendencia y la clientela de alto nivel adquisitivo se ha decantado por junio y septiembre, meses con menos concentración.
Los grandes clubs de la isla han echado en falta a los clientes de meses importantes y los clubbers y visitantes de lujo que llenan los espacios privados y consumen grandes botellas de champagne.
La proliferación de cientos de furgonetas negras por la isla ha ampliado el volumen de clubbers Vips y seudo-vips pero no equilibra el gasto de los clientes de gran lujo, que han fallado en julio y agosto.