Músico, productor y dj. Es un músico con excelente formación que ha derivado en ‘dj’ de éxito tras varios proyectos musicales. Habla claro, de forma abierta y valiente, incluso cuando defiende la música ante el terror. Sueña seguir pinchando en Pachá en una de la fiesta más locas y revolucionarias de la escena nocturna local. Su evento ‘Paris by night’ es un ‘dance-cabaret’ donde la electrónica se funde con el erotismo en un espectáculo total que el propio Bob Sinclar protagoniza desde la cabina y su sello personal de ‘house’ con toques antológicos.
Bob Sinclar sorprende a primera vista y aún más en la distancia corta cuando habla de la educación de sus hijos y de compartir su música y experiencias.
—¿Cómo se siente en la isla?
—Increíblemente bien, me encanta este lugar. Me gusta la isla, el espíritu de la gente que viene a descubrir algo, a ver los djs, a disfrutar también con su familia y lo que propone la isla. Me gustan las diferentes caras de Eivissa.
—Lleva tres temporadas con su residencia en Pachá ¿qué tal?
—Realmente el primer año fue a medias con Martin Solveig. Para tener una residencia en Pachá no es sólo pinchar, es entender el espíritu de este club, creo que mi música es perfecta para esta sala.
—Una noche loca en París y otra en Ibiza, usted propone dos locuras al mismo tiempo.
—Ya no hay noches locas en París, rememoramos cómo debían ser las noches en locales como Palace pero todo ha cambiado, antes era diferente, porque el mundo ha cambiado también. Cuando llegas a Ibiza el tiempo se detiene, no hay tiempo aquí, parece que no estamos en 2016 podríamos estar todavía en los años 70 o en cualquier otra época, hay una diversidad muy grande de fiestas y el espíritu es diferente. He pinchado en clubs de todo el mundo, pero no hay lugar ni público como Ibiza.
—¿Qué le hace a usted diferente de los otros cientos de djs que pinchan en Ibiza?
—Además de mi apariencia y mi forma de vestir, considero que para tener una residencia en la isla tienes que tener una gran trayectoria en la cultura de la música dance y de la música en general. Tienes que tener un formación importante para saber pinchar correctamente en un lugar. Algunos djs pinchan y punto, les da igual si es en Eivissa o en cualquier otro lugar, para ellos es lo mismo, para mi es totalmente diferente.
—¿La historia del club le marca?
—Soy consciente de que trabajo en un club histórico de la isla, el primer club de Eivissa, un lugar con historia, por donde han pasado artistas legendarios. Mi propósito y mi papel es entender lo ocurrido en el pasado para seguir la trayectoria. Tienes que ser consciente de su pasado, hay pequeñas piezas musicales que han hecho Pachá. A lo largo del año preparo mis sesiones con nuevos ritmos, es el sonido de ahora con pequeñas referencias del pasado.
—Usted es músico y ahí se ve la diferencia.
—Sí, pero es muy importante adaptar la música a Ibiza porque es un lugar muy diferente.
—Desde ‘Love Generation’ su primer gran éxito hasta ahora ha viajado con muchos tipos de música electro house, dance, reggae fusión, hip hop, pop rock ¿cómo calificaría la música que hace ahora?
—Música dance. Para mí todo es un ciclo, estamos en un momento en el que tenemos una nueva generación de clubbers, productores y djs, muchos productores han nacido con el EDM, para ellos es fácil hacer música electrónica y tienen una visión completamente distinta de la mía, sin embargo tengo la cultura para traerlos a mi mundo. Puedo llevar su música a la mía.
«La musica en Internet es como una tarjeta de visita, si no te gusta la tiras y si hay suerte la pincharán»
—¿Este es un año de cambios y de records?
—2016 es un año muy diferente, estamos saliendo de seis años de música EDM, muy masculina, de mucho ruido y está pasando algo diferente con la explosión del deep house y tech house, hay diferentes géneros de música en estos momentos. Están volviendo sonidos de los 90 con estos nuevos estilos. Hay mucho cambio en la música, más armonía, más voces, más melodía, más sexy, era un cambio muy necesario. La música dance viene de la música disco, buscamos momentos de diversión, de alegría y felicidad, y para celebrarlo necesitamos sentimiento de música disco.
—¿Qué importancia tiene el sexo en su música y en su fiesta?
—Nuestra música está basada en el sexo en el sentido de que es algo muy físico, sientes una química en tu piel, los sentimientos y sensaciones que tienes al escuchar la música. Intento pinchar sexy house music. Me encanta decir que pongo música para las chicas, pero para todo tipo de chicas, gays, drags, etcétera. El talento viene del lado femenino de ti. Entiendo ese tipo de música. En mi fiesta ‘Paris by night’ es obvio que el sexo es muy importante, pero de un modo elegante, es sexo de cabaret.
—¿Le gusta el exhibicionismo en la cabina?
—Me gusta que la gente además de dj me vea como un cuadro, que está pasando algo en la cabina con las chicas a mi alrededor, los performances, etc. Algunos djs no quieren a nadie en la cabina, a mi me gusta todo lo contrario, que me rodee el magnetismo sexy.
—Durante años usted ha vendido muchos discos como músico y productor ¿Cómo le ha afectando Internet?
—Hay un modo diferente de consumir música hoy en día. La gente va a Youtube, Spotify… utilizan todas las plataformas para escuchar música, pero ya no la compran. Es otro modo de entender el negocio, tenemos que aprender a producirlo. La música es como una tarjeta de visita si no te gusta la tiras y si tienes suerte pondrán tu canción, se escuchará en la radio y la pincharán otros Djs. Hago mi música para pincharla en el club ya que no encuentro esta música en ningún otro sitio. Hoy en día cada dj pincha una cosa diferente, tenemos personalidad propia, tienes que ser artista de 360º, tienes que ser buen dj, buen artista, buen productor, y el mejor en lo que haces. Puedes ganar mucho dinero con los bolos alrededor del mundo, sin embargo ya no hay dinero en la venta de la música.
«Tras el atentado en Niza di un concierto cerca y viví una experiencia única con la comunión del público»
—Su proyecto multidisciplinar Africanism All Stars sigue en marcha?
—A veces sacamos algunos temas, pero tuvo su tiempo, fue una época maravillosa pero hay cosas que no se pueden repetir. Fue increíble a principios del 2000, era una fusión de muchos ritmos musicales disco, ritmos africanos, percusión… Éramos un equipo de varios djs entre ellos Martin Solveig, Julian Jarr, Dj Gregory y pensamos en hacer una música basada en la percusión disco-african. Este proyecto inspiró a muchos djs. Seguramente en el futuro hagamos remixes de los éxitos.
—¿Hábleme de nuevos proyectos?
—He sacado mi nuevo single Someone who needs me va muy bien en Europa y sacaré un nuevo single en septiembre ‘Burn’. Estoy trabajando con un nuevo equipo para estar muy presente en la red, creo que es muy importante hoy en día, me hace sentir joven. Hay que apostar por la red y trabajar en equipo.
—¿Cuál es su sueño ahora?
—Cuando era joven mi sueño era convertirme en dj, después ganar dinero para vivir de ello, y luego que mis canciones sonasen en la radio. Ahora soy una estrella, pinchas en discotecas por todo el mundo y tengo mi residencia en Pachá. Mi sueño sería pinchar en Pachá tanto como pueda.
—¿Y un sueño personal?
—Darles la mejor educación a mis hijos. Lo más difícil es educar a tus hijos, darles lo mejor, tener este intercambio de emociones, estar junto a ellos tanto como pueda ya que serán adultos dentro de poco, hay que compartir cuantos más momentos mejor. Me encanta transmitir, compartir mis experiencias y emociones con mis hijos y con la gente, educar a la gente, darles lo que yo he aprendido.
—La época que estamos viviendo ahora en el mundo, especialmente en Francia con el terrorismo ¿se siente afectado como músico, dj y productor?
—En Europa vivimos libres, podemos hacer lo que queramos. Si alguien te intenta cerrar la boca, decirte que te va a contar su verdad única, lo que tienes que hacer o como te tienes que comportar porque lo que haces está mal no puedes hacerle caso. Si me quieren obligar a pensar como ellos quieren me da más fuerza para crear mi música. Unos días después del atentado en Niza hice un show en un festival cerca de la ciudad, se vendieron 10.000 tickets y tuve una de las mejores químicas que he tenido con el público, fue increíble, la gente estaba agradecida de que pinchara allí y disfrutándolo igual que yo.
«Se puede ganar dinero haciendo ‘bolos’ alrededor del mundo, pero con la venta de cd’s ya no»
—¿La electrónica no se rinde al horror?
—El público sentía y decía: estamos aquí, somos libres y vamos a seguir bailando por la gente que ha muerto porque todos somos Francia y somos fuertes, vivimos en un país libre y nadie nos va a decir lo que tenemos que hacer. Si tengo una misión en la tierra quizás sea con mi música, no lo sé. Considero que todos los djs tienen que continuar en esta dirección, luchar por estos sentimientos de alegría.
—La música es comunicación.
—Exactamente.
—¿Le gusta la gastronomía?
—Pues la verdad es que no mucho, no soy muy gastrónomo, no bebo vino. Si te gusta mucho la comida coges peso y tengo que cuidarme bastante.
—Parece que los dj’s franceses están perdiendo terreno en la escena de la música electrónica frente a la nueva oleada de alemanes y holandeses. Hay franceses famosos como Martin Solveig, David Guetta, usted y pocos más ¿qué ha pasado?
—No estamos perdiendo poder, quizás estuvimos un poco sobrestimados entre 1999-2000. Cuando llegamos los franceses y alemanes, perdimos nuestro complejo frente a los productores ingleses. La cultura de la música dance llego muy tarde a Francia. Tuvimos una oleada muy fuerte, y ahora en la época del 2.0 con Martín Solveig. David Guetta, entre otros, recuperamos terreno.
—¿El talento no tiene patria?
—El talento viene de todos lados del mundo así que es el tiempo de djs suecos, holandeses, españoles… es una industria global, ya no es un país que controla toda la industria. La música dance ha explosionado en todo el mundo. La gente joven está en Internet y la red es un sólo mundo.
—¿Qué le parece la evolución turística que esta tomando la isla tanto lujo, glamour, vips en las fiestas?
—Es muy bueno, en estos dos años he visto que no afecta para nada al espíritu de la isla. En la discoteca tienes la cabina, el público y detrás el vip, se respetan unos a otros, la gente rica, normal y los fans que vienen como son. Hay más dinero para la isla, viene más gente joven a disfrutar y eso va a beneficiar a todo el mundo en general.
—¿Hay demasiada gente en agosto en este rincón del mundo?
—El mundo entero está vacío menos Ibiza, todo el mundo quiere pasar sus vacaciones aquí para experimentar y compartir ese espíritu maravilloso que se vive aquí. Y para ver mi show, claro…