La gran mayoría de los asistentes a la presentación del documental de Canal+, ‘Pacha, el arquitecto de la noche’ en el Cine Capitol de Madrid en homenaje a la figura de Ricardo Urgell, creador de la marca Pacha, coincidieron en denominar la película de 90 minutos sobre la vida y milagros del ‘arquitecto de la noche’ como entrañable.
El documental dirigido por Miguel Barden se emitió el miércoles por la noche en Canal+ y hace un recorrido por la vida de Urgell y la marca Pacha desde sus inicios en Sitges en 1967. «Convertimos una masía payesa en el primer Pacha con un millón de pesetas, la entrada costaba 150 y la primera noche hicimos 34.300 pesetas de caja. Un dineral para la época» apuntaba con tono nostálgico Urgell. Allí comenzó la aventura de una de las marcas de ocio nocturno que ha hecho historia en España y a nivel internacional en la última década con franquicias en los cinco continentes, pese que a Ricardo.
«La palabra fiesta me horroriza, me acojono. Quizá soy demasiado serio y en este negocio hay que ser más bandarra».
La aventura llegó a Ibiza en 1973 con Pacha Ibiza, la marca más emblemática del grupo de todos los tiempos. De ella hablan también en la cinta los Djs David Guetta, Steve Aoki, Giorgio Moroder y Piti Urgell; Carlos Martorell, José Pascual, José María Fabregas, Toni Riera, Ángel Nieto y Mimo Ferretti, entre otros. La marca despegó en Madrid con un sonado éxito que cuentan con todo lujo de detalles en el metraje, José Coronado, Miguel Bosé, Ana Torroja, Nacho Cano, Martín Castaño, Pepe Barroso, Tomy Botas, Kike Sarasola y Pepe Vela, entre otros. Eran los tiempos de la movida madrileña y Pachá era el templo.
La figura de Ricardo es el hilo conductor de su obra, contada en primera persona:«Tenemos que vender España, porque es una maravilla, un país de fiesta y diversión y también de pandereta donde se baila y disfruta más que en otro lugar del mundo». Su relato sincero y entrañable arrancó el aplauso del público asistente al Capitol en varios ocasiones:
«He sido mejor empresario que padre. Soy un Pacha con patas, tras 48 años al frente de las discotecas estoy empachado de comer tanto Pachá. Ahora busco evadirme, disfrutar del campo, la montaña, los amigos, el mar y navegar en mis barcos»
El evento que comenzó con el desfile de famosos ante el photocall del teatro prosiguió en la exclusiva sala Opium hasta bien entrada la madrugada con un desfile de caras conocidas del mundo empresarial madrileño, famosos, personajes del papel couché, deportistas, clientes y amigos de la familia Urgell, que asistió al completo. El homenaje cinematográfico al gran propulsor de la noche madrileña, catalana e ibicenca se convirtió en un carrusel de besos y abrazos para el anfitrión, visiblemente emocionado, acompañado de su mujer, María Chaver, y rodeado por cientos de amigos de toda España. Entre ellos, el trío estrella de Master Chef, con los chefs Jordi Cruz, uno de los más simpáticos y asequibles de la noche, Pepe Rodríguez, Samanta Vallejo-Najera, Ángel, Fonsi y Gelete Nieto, la familia Goyanes-Lapique, Antonio Carmona, Toni Caravaca, Alex Hafner, Massiel, los fotógrafos Silvia Polakov, Toni Riera, Carlos Martorell.
También estuvo arropado por una amplia representación del staff de Pacha Ibiza y la oficina de Barcelona, cargos directivos, relaciones públicas y sus familiares más directos Ana, Iria, Hugo, Patricia, Piti y su mujer Maribel Baret, Panchi Urgell y su mujer Aiste Jürate; María y Gloria Calderón; Francisco Ferrer, Juanan Martínez, Roseta Montenegro, Joan Gracia de Tricicle; el pintor Willy Marquez; los Djs Sebastian Gamboa y Victor Nebot; José Pascual, Pocholo Martínez, Parish, Sara Planells, Antonio Navarro, Hector Cardell, Lidia Guirao, Alba Pau, Gloria Coromina, Cres Huerta, Josep A. Escandell, Carlos Ferrer, Josep Gomara, Reyes Galiano, Jose Tur (Pep Gamba), Nieves Mari, Veronica Manzano, Alba Miret, Hochi, Marco Frisina, Romain, Tito Claraso, Nuria Muñoz, Ricard Garriga, Carlos González, Teresa Retolaza, Curro Bermúdez, Ángel Zorrilla y Noelia Torres, entre otros.
El ‘arquitecto de la noche’ dejó una huella de cariño y afecto entre todos los asistentes.