Los fantasmas visitaron por última vez este año La Bodega de Ibiza. La fiesta de Halloween coincidió con la despedida de este mítico restaurante de tapas situado junto a la muralla de Dalt Vila. La fiesta se apoderó de todos: clientes, camareros, cocineros y todo el personal de este local echaron el resto para hacer del cierre una noche inolvidable. Hasta los cocineros iban disfrazados. No faltó ni un detalle para dar el toque terrorífico a los comedores del restaurante.
El Dj Garchy hizo que los clientes movieran el esqueleto hasta desfallecer entre los juegos de luces, humo, arañas, calaveras y alguna que otra calabaza.
Este año hubo más gente que nunca, tanta que los responsables de La Bodega hubieran seguido con el restaurante abierto hasta el amanecer.
The Rocky Horror Picture Show fue el tema elegido este año para guiar a quienes se acercaron hasta el restaurante. Se trata de una película de culto sobre una pareja a la que se le avería el coche y se ve obligada a pasar la noche en la mansión del Doctor Frank-N-Furter durante una convención de transilvanos con motivo de la creación de su criatura, Rocky Horror, un hombre perfecto cuyo «medio» cerebro pertenece a un delincuente juvenil.
La Bodega dijo su terrorífico adiós hasta el 1 de abril de 2017.