la apertura fue a las seis de la tarde y a las 10 ya apenas cabía un alfiler
Las puertas de Cova Santa abrían de par en par a las seis de la tarde del domingo para dar comienzo a su primer gran evento de la temporada: la deseadísima inauguración del segundo año de WooMooN en Ibiza.
Era tal el interés generado que a las ocho de la tarde el recinto estaba ya casi al borde de su capacidad total y a partir de las 10 de la noche, coincidiendo con el inicio de la actuación en directo de Rampue, residente de la fiesta y cabeza de cartel del evento, apenas ya cabía un alfiler.
Llegada la medianoche, el espectáculo, la luz y el sonido se desvanecieron en el escenario exterior pero la música y el show continuaron en la discoteca interior de Cova Santa, hasta altas horas de la madrugada.